31 de agosto de 2014

Un abrir y cerrar de ojos.

Hay sueños largos, le dijeron. No todos suelen ser bonitos.

"y así, luego del sueño más extenso y menos deseado, despertó. Meses que le parecieron décadas, que atravesaron todas las estaciones y que le dejaron el sabor más amargo de toda su vida; sin embargo, cada día un poco menos, hasta que se hizo insípido.
De repente, aun despegando los ojos, miró hacia atrás y descubrió que en realidad ya se había repuesto, mucho antes de lo que ella misma había pensado: Dejó de amar exactamente en el mismo instante en que notó que no querían iniciar un vuelo hacia rumbos distintos (y nuevos) junto a ella (...)"


Dicen que con los ojos abiertos y los pies alineados te sientes más seguro para volver a saltar al vacío. Ideal si el salto puede hacerse desde las cumbres más altas. Siempre se deben subir las apuestas.


Ay, carambita :)