28 de noviembre de 2012

Hola.



Hubo una vez una Pali. Esa Pali era feliz y tenía una vida bonita en Concepción. 
Hubo una vez un Cristian. Ese Cristian era feliz y tenía una vida bonita en Arica. Y luego se vino a Concepción...

Pali y Cristian debieron haberse conocido antes, pero a decir verdad, ambos vivían parte de sus vidas en planetas paralelos. Se veían ocasionalmente, de lejos, sin darse mayor importancia. Eso, claro, hasta un inesperado-medio-planificado 28 de Noviembre del 2009. Ese día, ambos se encontraron... medio en la realidad y medio en la fantasía, pero se encontraron al fin y al cabo. El encuentro duró poco, y entre los actos de escapismo de Cristian y la frialdad de Pali, ambos pensaron que había sido un día como cualquier otro.





Pasemos por alto el día 29 de Noviembre del 2009, la búsqueda incansable de Pali en el directorio udec para dar con el escapista, y el saludo de cumpleaños atrasado. Quedémonos mejor en las mil y un conversaciones, las listas de post datas, y los coqueteos implícitos más explícitos que he visto. Quedémonos con las cosquillas en la guata, las mejillas sonrojadas, los smoothies, los frugelés. Las sorpresas, las cartas, los abrazos, los cariños. Quedémonos ahí, ¡sí! porque es ahí donde seguimos. 

Y transportémonos en el tiempo a una que otra discusión con final feliz, a los regaloneos eternos, a las siestas interminables, al ver series con kilos de comida, a los antipoemas de pantuflas y brócolis, a la filosofía, la vida, la educación, los planes, el amor.


"Si tu m' aimes, je t' aime". Sí, te amo. No sólo eso, yo te muy amo. Caleta de mucho, en todas sus formas: Te amo contenta, enojada, amurrada, estresada. Te amo con sonrisas y lágrimas. Te amo con dulzura y con brusquedad. Te amo sana y enferma -más enferma últimamente-. Te amo despierta y cuando duermo. Te amo con rudeza y también a lo jipi. Te amo dulce, salado, agraz. Te amo maniática e impulsivamente, y también te amo relajada y libremente. Te amo hipocondríaco y con todas tus NEE. Te amo en francés, inglés, alemán, aymara y hasta chino mandarín aunque no sepa. Te amo de maneras tontas e inteligentes. Te amo hoy y te quiero amar mañana. Te amo sabiendo que te amo, pero sin saber aun cuánto más puedo amarte.

Felices veintidós, feliz vida entera Cristian rey del mundo.-